Religion y estado

Al agua patos!!

Últimamente hemos visto y oído cosas que muchos pensaban ya exiguas, pero por lo visto parece que aun queda el “rencor de viejas deudas” y digo bien el rencor de esa vieja deuda que se empezó en la democracia, y es que hemos sido excesivamente crueles con la Santa Iglesia Católica Apostólica Romana (SICAR de ahora en adelante) les hemos quitado todos los privilegios que tenían en la época del tío paco, ya no pasean a nadie bajo palio, no tienen subvención estatal, no pueden participar en las “manifestaciones” en la plaza de Oriente ahora lo hacen en colon, y lo hacen bajo la bandera de la España, esa España que se rompe en pedazos, esa España gobernado por los temibles.

Yo siempre he estado totalmente en contra de hacer política en la iglesia, a pesar de que siempre se ha intentado, en la época del tío paco las iglesias eran hervideros derechistas y también revolucionarios, En la mayor parte del estado Español, las iglesias eran como las sedes del Glorioso movimiento Nacional, allí se hacía política las sacristías y los despachos se llenaban de camisas azules y allí discutían a salvo de cualquier oyente indiscreto… cuantos secretos bajo los grandes muros de piedra y bajo ellos…

En el otro lado encontramos Euskal Herria, allí también había política pero otra totalmente distinta, había política de liberación en las iglesias en las sacristías y en los pulpitos empezaban a sonar otros ecos que querían cambiar la historia de un pueblo oprimido, donde mejor que juntarse que en la casa de Dios, allí ni el mismísimo tío paco tenia potestad para actuar, y cuando intentaba alguna acción contra “los putos curas y obispos rojos” se cuidaba bien que no apareciera el estado de por medio, bajo algunas iglesias dirigidas por esos curas rojos, se formaron ejércitos, al servicio de Dios y Euskadi. Lastima que luego cuando la misión parecía conseguida muchos decidieran seguir un camino de sin razón.

Yo que lo he vivido desde dentro, puedo decir que las bases no tienen por qué tener nada que ver con la jerarquía, y esto frecuentemente y por desgracia no solo pasa en la SICAR. No nos olvidemos que ser cristiano no significa pertenecer a la SICAR, hay muchas formas de ser cristiano…

“Al Cesar lo que es del Cesar, y a Dios lo que es de Dios”